La ultraderecha, como grupo político que dice interpretar la realidad, casi siempre se apoya para gobernar en una libertad de mercado que no existe.más que en la propia fantasía de la libertad que venden. Y los desprevenidos caen, por cierto en una calamidad indiscutible con el pasar del tiempo.
Este tipo de política, enfrenta desafíos significativos cuando la economía está marcada por la devaluación y salarios bajos. En contextos donde la población enfrenta dificultades económicas, como la pérdida de poder adquisitivo y el aumento del costo de vida, puede ser complicado para cualquier gobierno mantener el apoyo popular.
La devaluación puede generar descontento social, ya que afecta directamente a la calidad de vida de las personas. Si los salarios no se ajustan adecuadamente a la inflación y a la devaluación, la situación se vuelve insostenible para muchas familias. Esto puede llevar a protestas y a una disminución en la popularidad del gobierno, independientemente de su ideología política.
Además, la ultraderecha a menudo se basa en promesas de seguridad y estabilidad, y si la economía no responde a esas expectativas, puede ser difícil para ellos cumplir con sus promesas. La gestión económica es un factor clave en la percepción pública y en la capacidad de un gobierno para mantenerse en el poder.