Las elecciones primarias dejaron un sabor amargo en la boca de dirigentes y militantes del Frente de Todos, que vio cómo se le escapaba lo que parecía un triunfo seguro en los papeles. En la categoría Diputados nacionales, en siete de las ocho secciones electorales y en la gran mayoría de los municipios, las dos listas de Juntos superaron por amplio margen a la boleta celeste y blanca.
Distinta fue la cosa en el padrón de extranjeros, donde el oficialismo duplicó la cantidad de votos que cosecharon las listas encabezadas por Diego Santilli y Facundo Manes, y se impuso en casi todas las secciones electorales.
Se sabe que el padrón de nativos y el padrón de extranjeros corren por carriles separados y que estos últimos no participan de la elección de cargos nacionales. Por eso, en este turno eligieron candidatos a diputados y senadores provinciales, concejales y consejeros escolares.
El resultado final fue apabullante: en las 1.777 mesas escrutadas se contaron 92 mil boletas del Frente de Todos y sólo 47 mil de Juntos. En la compulsa interna, los del PRO le pegaron una verdadera paliza a la UCR: 34 mil a 13 mil. Los radicales apenas consiguieron ganar en la cuarta y en la séptima, aunque estuvieron cerca -a 63 votos- en la quinta.
Hay que recordar que el padrón de extranjeros está conformado por cerca de 870 mil ciudadanos. Se estima que el 43 por ciento es de nacionalidad paraguaya y el 23 por ciento de nacionalidad boliviana. Como no están obligados a votar, tiene una participación baja, de entre 20 y 25 por ciento.