Fuego contra fuego o fuego corta fuego. El fuego, una constante, y nada como un buen ataque para desviar la atención: Santiago Passaglia cargó contra Medioambiente y contra Cabandié por la quema en zona de las islas.
Lo cierto es que cuando la política apunta, es la misma política de protección la que garantiza que no pase nada con los responsables; en éste caso se trata de la destrucción de humedales y la quema de campos; antes en el 2008 y hoy en el 2020, ambos humos convergen para destruir, y negar responsabilidades. Cualquier especulación y protección valen mientras no avance la justicia contra los responsables del fuego y el humo en las islas y hasta de los culpables de enriquecerse con el dinero de la obra pública y sus retornos mal habidos.
Como ya contamos a nuestros lectores, Passaglia, fue señalado e identificado como iniciador de la quemas de pastizales en las islas que derivaron en una nube negra de hollín y choques en cadena en la Panamericana en el 2008 y hoy con igual método, la quema de pastizales en las islas son atribuidas a Santiago Passaglia, hijo de Don Ismael y diputado de Juntos por el Cambio que posee como ya es de dominio público, 877 hectáreas de campo ubicado en las Islas de Gualeguay para pastoreo de ganado.
Hoy, año 2020, los bienes declarados como donados por el diputado Santiago Passaglia coinciden con uno de los seis campos declarados en su última declaración jurada presentada en la Legislatura bonaerense que data de 2018 sin actualizar. Además de las hectáreas en Gualeguay, el diputado como es de conocimiento público, cuenta con otros cinco campos, uno en San Pedro y otros cuatro en Ramallo. Todos al norte de la provincia de Buenos Aires.
¿Hoy su isla arde? Mientras hay humo, el diputado, señalado, camina y hace ejercicios tranquilo por el barrio Costa Juncal donde construye una casa de las más caras del lugar, sin conocer el origen del dinero con el que adquirió el predio donde construye su casa (algo que ya denunciamos oportunamente, hasta con planos) y cuya venta habría oscilado los 110.000 dólares.
En este sentido y como dato de color, los camiones de la municipalidad ingresaron en muchas oportunidades al barrio cerrado, fuera del horario permitido, a bajar materiales de dudosa procedencia, que es lo mismo que pensar que esos materiales son enviados desde el mismo municipio y con esto el significativo ahorro del diputado.
Volviendo al tema del fuego y los fuegos, alguien debe estar investigando la intencionalidad de los focos de incendio en el Delta del Paraná; sin embargo lo cierto es que otra vez el apellido Passaglia ocupa el centro de mucho más que meras sospechas.
Los hermanos Passaglia, no son novedad en cuanto a concentrar el poder económico en San Nicolás; sin embargo cuando se habla de inacción de la justicia y los intendentes, la historia se repite. Antes Carossi que nada hizo y hoy Manuel Passaglia, otro intendente que nada hizo ni hace respecto al humo y la quema de pastizales en la isla familiar si se quiere, que afectan a la ciudad. En aquella y en esta oportunidad, la justicia ni mu.
Nosotros no olvidamos ni la quema ni el humo ni los delitos. Tampoco olvidamos la Carpeta Maldita, la corrupción de la que todos los medios locales callaron y otras denuncias y vínculos con los mismos nombres sobre irregularidades en el puerto, algo que al parecer cajonea algún fiscal en la ciudad y otro “Juez”, defensor de narcos, aseguran, y protector de nombres, que aún no se jubila. Eso sí, los que callaron se despachan a cambio de una vil extorsión; algunos por una pauta, otros por la sola garantía de un dinero seguro, y otros, acaso como fiscalías en modo mute, para que los protejan. ¿A cambio de qué? Es algo que dejamos a consideración y deducción de los lectores.