La escribanía de Cambiemos en San Nicolás no tarda en aprobar dinero para obras públicas.
Palo y a la bolsa, una expresión que significa “hacer algo rápido, sin miramientos, y obtener el rédito que de ello provenga”.
Sin enviar para su análisis los proyectos a comisiones, llama la atención la urgencia de aprobar por un lado 32 millones para modernizar el microcentro contra la opinión de la mayoría de los comerciantes, y otros 53 millones para desagües que se olvidaron de realizar y ampliaciones que no habían tenido en cuenta. Más de 85 millones de pesos muy convenientes.
11 minutos duró la sesión del Express de la semana pasada, algo viene llevando a cabo el municipio de San Nicolás para que los nicoleños y la oposición nunca sepan, cuánto vale la obra, cuánto se paga y quiénes obtienen la licitación o en su muy sugerente opción de contratación directa.
Manuel, la marioneta, envía proyectos que se tratan sobre tablas sin el paso previo de ser enviados a comisiones para su estudio y evaluación.
El apuro por obtener dinero público llama la atención en la ciudad. Pero asi sesiona Cambiemos cuando de dinero se trata.
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