¿Te acordás de aquellos bancos?

¿Quién no recuerda con nostalgia aquellos bancos de plaza?

La San Nicolas cementada y embaldosada, primero pintó aquellos bancos de color blanco, una antiguedad como fue pintar con cal los árboles para que no los coma alguna peste; y luego desaparecieron en pos del negocio de alguien y fueron tirados en alguna chatarrería.

Nuestros queridos bancos fueron reemplazados por adefesios genialmente diseñados por un arquitecto municipal que sólo llena las paginas del libro de los malos recuerdos, que también fue el ideólogo del sistema de riego de los canteros de Avenida Savio y las plantas secas, y aquellos mojones con luces en la esquina del teatro.

Lo cierto es que los bancos desaparecieron sin estar rotos, pero nos costó muchas monedas de los impuestos para que seamos el municipio que mejor cuida y conserva el pasado y los bienes históricos y culturales de la ciudad. Otro sapo que se comieron muchos en la ciudad y comentan enojados.

No conservamos la historia y casi es una herejía cultural olvidar, como los antiguos y caros balastros de plaza Mitre que aún hoy no se sabe adónde fueron a parar.

Memoria