Passaglia deberá ganar con el 60% de los votos para justificar su engaño a Cambiemos

Passaglia, ahora Cambiemos, en las PASO obtuvo apenas el 35,5% de los votos, y le había garantizado con su salto a la gobernadora Maria Eugenia Vidal, el 60% de los votos.

Después de tantas obras y tantos cargos obsequiados por la gobernadora Vidal al propio Ismael y a los hijos, miran de reojo las promesas del intendente de licencia, hoy envejecido y que sólo aparece para insultar, munido de improperios propios de quién sabe que su derrota estatal comenzó como cuando le dieron la espalda en la cámara de diputados de la provincia.

Unidad Ciudadana, 1País y Cumplir prometen aguarle la fiesta de los puestos del estado a la familia Passaglia que ya da muestras de su temor. Su debilidad dicen, comenzó con el fracaso de Expoagro y su débil estado de salud.

A pesar de las sospechas de corrupción, un estado ausente, un hijo interino con un pasado que lo marca, los desvíos de fondos, las tasas que les cobra a los inundados de La Emilia, la falta de respuestas ante requerimientos de los bloques de concejales de la oposición, un pasado y presente repletos de violencias e insultos; con una ciudad sin defensa civil, una ciudad sin GAD, sin policía científica ni verificación técnica, y con las tasas más altas de la provincia, el temor a que dejen de hacer obras sumado a los punteros que supo cosechar en cada barrio de la ciudad, un 35% de votos no es una mala elección.

Sin ser el intendente de la seguridad como prometió, ni generar políticas de empleo como también prometió, y la imagen negativa ante los hechos de las inundaciones, le va a costar alcanzar lo que su soberbia firmó, el 60% de votos que apruebe su gestión.

Sin obras de gas porque la obra para cada particular, nos comentan, alcanza los 60mil pesos; cuadras sin pavimentar, barrios anegados sin pavimento, y los dispensarios cerrados, la gente en su imaginario fantasioso aún le teme, pero menos le creen.